( del libro “Despierta tu Potencial” )
por: Johnny Bardavid
La felicidad y el éxito no son un destino, son el camino y la dirección en que viajamos momento a momento.
Nuestra forma más usual de comprender la felicidad y el éxito es: “Cuando logremos lo deseado – Cuando tenga el auto – Cuando llegue a la universidad – Cuando gane más dinero – Cuando me cambie de trabajo – Cuando me alivie, Cuando me case – Cuando tenga hijos – Cuando viaje a…, etc.”.
Este modo de pensar es efímero porque cuando lleguemos a tener lo que deseamos, pronto necesitaremos “más de lo mismo” o requeriremos de otra cosa u
otro servicio y la búsqueda de “el éxito y la felicidad” se convierte en el “juego de nunca disfrutar el presente”.
Además de esta persecución sin fin, ¿qué crees que estamos prepavimentando en el camino de la vida cuando nos enfocamos en lo que no tenemos ahora?
¡Estás poniendo tu atención en la ausencia de éxito y felicidad hoy y eso es lo que continuarás atrayendo, privación de bienestar, convirtiéndote en el ladrón de tu paz y tranquilidad interior, en tu peor enemigo, porque piensas y actúas
(Sever la)!
Una vez, el jefe de los demonios vio que sus diablillos no tenían nada que hacer y les dijo: “¡Vayan a La Tierra y hagan unas diabluras!”
Cuando llegaron a nuestro planeta, discutieron y decidieron que la mayor diablura sería esconder la felicidad. Unos sugirieron ocultarla en la montaña más alta, pero pensándolo bien, imaginaron que algún día, los humanos llegarían ahí y la encontrarían.
Después se les ocurrió esconderla en lo más profundo del mar, pero también reflexionaron que algún día, los avances científicos les permitirían encontrarla.
Finalmente se pusieron de acuerdo: “¡Vamos a esconderla dentro de ellos mismos!, ¡No la encontrarán porque nunca se les va a ocurrir buscarla ahí!”
Comprendiendo esta parábola, ahora tenemos la maravillosa oportunidad de auto realizarnos. La felicidad y el éxito forman parte de nuestro potencial latente, no son una elusiva quimera cuando se conoce y se aplica el poder de la Ley de Atracción. Dentro de nosotros mismos está la clave para atraer la abundancia y el bienestar; la felicidad y el éxito que todos deseamos.
“Soy feliz y exitoso ahora porque ayudé a una persona;
Encontré una solución para un problema;
Tuve éxito en una entrevista;
Se me quitó el dolor de cabeza;
Respondí bien a las preguntas del examen;
Aprecié la belleza de una mujer,
Logré que me firmaran el pedido;
Hice un buen negocio;
Me compré el carro que deseaba;
Me levante temprano
Terminé una tarea, me siento satisfecho por eso
Perdoné al que me ofendió”.
Y así, uniendo instantes de autosatisfacción, de felicidad y de éxito; apreciándolos y bendiciéndolos, voy atrayendo una vida exitosa y feliz.
Somos aún más felices cuando entendemos esto y nos acostumbramos a Dar, en el más amplio y bello sentido de la palabra. Recordemos la historia del mendigo. Mientras más damos, más atraemos de lo mismo. Lo que podemos dar siempre en abundancia, sin que nos cueste nada, son: validaciones, apreciaciones, respeto, admiración, entre otros, aunque estemos pasando por toda una serie de dificultades personales.
En este proceso estaremos colocando los cimientos que harán que nuestra vida mejore a través de una energía poderosa que atraerá bienestar y abundancia en el futuro, si no la boicoteamos.
Ejemplo del éxito que está a nuestro alcance si no nos autolimitamos:
Dos niños patinaban sobre una laguna congelada. Era una tarde nublada y fría, pero los niños jugaban sin preocupación cuando, de pronto, el hielo se rompió y uno de ellos cayó al agua. EI otro, viendo que su amigo se ahogaba, tomó una piedra y empezó a golpear con todas su fuerzas hasta que logró abrir un agujero más grande y así salvarlo.
Cuando llegaron los bomberos y vieron lo que había sucedido, se preguntaron: “¿Cómo lo hizo? EI hielo está muy grueso, es imposible que este niño con sus manos tan pequeñas haya podido romper el hielo con esa piedra”. En ese instante apareció un anciano y dijo:
-Yo sé cómo lo hizo.
-¿Cómo?… le preguntaron.
-¡No había nadie a su alrededor para decirle
que era imposible!
Esto se confirma también con la historia de Roger Bannister, el primer hombre que logró correr la milla en cuatro minutos.
Desde principios del siglo pasado se había establecido un récord de poco más de cuatro minutos que no se pudo romper por cincuenta años, principalmente porque los médicos del deporte, los conocedores, los especialistas, habían afirmado que era físicamente imposible para un ser humano disminuir este tiempo.
Después que Bannister logró hacerlo, muchos atletas han corrido la milla en menos de cuatro minutos porque se había borrado de su mente esa conciencia colectiva de lo imposible.
Reflexión:
¿Cuánto nos autolimitamos con pensamientos empequeñecedores como el “no puedo”, “no soy capaz”, “es muy difícil”, “eso nadie lo ha hecho”, etc.?
¿Cuáles son tus pensamientos auto limitantes hoy?
Dándonos cuenta consciente de estos pensamientos
Es más fácil liberarlos, dejarlos ir.
¿Cómo podemos asociar la flor y el timbre
con el texto de artículo?
La flor representa algo bello, atractivo, hermoso.
El timbre sirve para llamar la atención, para alertarnos sobre algo.
Cada vez que oiga un timbre recordaré que la belleza y hermosura de la felicidad y el éxito están a mi alcance, momento a momento.
Los jóvenes podrían asociarlo con un timbrazo de llamada de atención para no destruir la flor de la juventud en actitudes que los pueden entorpecer para siempre.
Texto extraído del libro
“Despierta tu potencial” – Ing. Johnny Bardavid
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