El gran maestro propuso un reto a un problema…

( del libro “Despierta tu Potencial” )
por: Johnny Bardavid

El Gran Maestro y el Guardián se dividían la administración de un monasterio Zen. Cierto día, el Guardián murió y fue preciso sustituirlo. El Gran Maestro reunió a todos los discípulos para escoger quién tendría el honor de trabajar directamente a su lado.

-Voy a presentarles un problema -dijo el Gran Maestro- y aquél que lo resuelva primero, será el nuevo Guardián del Templo.

Terminado su corto discurso, colocó un banquito en el centro de la sala. Encima estaba un florero de porcelana -seguramente carísimo- con una rosa roja que lo decoraba.

-Este es el problema -dijo el Gran Maestro-. ¡Resuélvanlo!

Los discípulos contemplaron perplejos el “problema”, pero lo que veían eran los diseños sofisticados y raros de la finísima porcelana y la frescura y elegancia de la flor. ¿Qué representaba aquello? ¿Qué hacer? ¿Cuál sería el enigma? Pasó el tiempo sin que nadie atinase a hacer nada salvo contemplar el “problema”.

Hasta que uno de los discípulos se levantó, miró al Maestro y a los alumnos, caminó confiadamente hasta el florero y lo tiró al suelo, destruyéndolo.

-¡Al fin alguien lo hizo! -exclamó el Gran Maestro- ya empezaba a dudar de la formación que les hemos dado en todos estos años. ¡Tú eres el nuevo Guardián!

Cuando el alumno volvió a su lugar, el Gran Maestro explicó:

-Yo fui bien claro. Dije que ustedes estaban delante de un “problema”. No importa cuán bello y fascinante sea un problema o una tentación, tiene que ser eliminado.

Un problema es un problema. Puede ser un florero de porcelana muy caro, un lindo amor que ya no tiene sentido, un camino erróneo que precisa ser abandonado, por más que insistamos en recorrerlo porque nos trae confort o placer momentáneos.

Sólo existe una manera de lidiar con un problema: Atacándolo de frente. En esas horas, no se puede tener piedad ni ser tentado por el lado fascinante que algunos conflictos acarrean consigo. Recuerda que un problema es un problema. No tiene caso tratar de “acomodarlo” y darle vueltas, si al fin y al cabo ya no es otra cosa más que un PROBLEMA.

Déjalo, hazlo a un lado y continúa disfrutando de lo hermoso y lo que vale la pena en la vida.

¡NO HUYAS DE ÉL!… ACABA CON ÉL

Reflexión

¡No racionalices, no dejes para mañana

lo que es obvio que debes hacer HOY!

Texto extraído del libro
 “Despierta tu potencial” – Ing. Johnny Bardavid

Para adquirir el libro completo click en la siguiente liga:

http://www.superacionefectiva.org/productos/libros/

¿Qué hacer para iniciar una transformación positiva?
Agregar valor agregado a tu día a día

Video recomendado:
“La Importancia del Valor Agregado”

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *